Las condiciones de vida en el conurbano bonaerense han sido fuertemente afectadas por el escenario de pandemia y Aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO). La pobreza y la indigencia en el Gran Buenos Aires siguen escalando a índices escalofriantes. La extensa recesión combinada con inflación, vienen golpeando los ingresos de los hogares, limitando las alternativas laborales de los y las trabajadores que desarrollan múltiples estrategias familiares y comunitarias para hacer frente a la crisis, como explica el informe “El Conurbano en la cuarentena III” de septiembre 2020.
El último informe de EPH refiere que un 47% de la población y un 37% de los hogares del conurbano es pobre, exhibiendo un incremento sustantivo los últimos años y en particular a partir de la pandemia. En 2016 la población pobre representaba el 25%, en 2019 alcanzaba el 31,8% y escala otros 6 puntos según el último informe del INDEC. En especial entre niños y niñas y adolescentes, la pobreza llega al 56% en el conurbano, el primer trimestre de 2020, evidenciando la extrema vulnerabilidad de esa población. […] [2] Investigadora docente del Instituto del Conurbano de la UNGS y Coordinadora del Observatorio del Conurbano
[3] Investigadora docente del Instituto del Conurbano de la UNGS